Buenos Aires SOS

Luego de tantas idas y venidas de parte del gobierno de la ciudad para impedir que La Renga se presentase en CABA, finalmente la insistencia de la banda y de sus seguidores consiguieron lo más ansiado: un verdadero banquete en un estadio -el Thomás Ducó, Huracán- copado, una vez más, por la alegría y la fiesta de los mismos de siempre.

Así se vivió arriba -como el propio Chizzo no se cansó de agredecer- y abajo del escenario, donde la alegría y el rock emanados por los 38 mil espectadores fueron los protagonistas indiscutidos.

La banda de Mataderos abrió el show con “Corazón fugitivo”, del disco que da nombre a la gira “Pesados Vestigios” y cuya última presentación había sido el 6 de mayo, en Jesús María, Córdoba.

Chizzo, Tanque y Tete se mostraron enérgicos y dieron un show como al que nos tienen acostumbrados, con temas de su último disco (como “San Miguel”, dedicado a Miguel Ramírez, el joven muerto por una bengala en aquel recital de la banda en el Autódromo de La Plata) pero sin dejar de lado los clásicos “El final es en dónde partí”, “La razón que te demora” y el mítico cierre con “Hablando de la libertad”.

El campo se llenó de banderas y trapos de todos los lugares del país. No faltó una bandera con la frase “Macri gato”, esperable en un lugar donde se reúnen multitudes de jóvenes que se encuentran a diario con la imposibilidad de conseguir empleo o lo hacen bajo condiciones de enorme precariedad.

Luego del show, se desconcentró rápidamente. A la de ayer, le siguen tres fechas más en CABA que agotaron sus entradas en escasas horas tras la enorme expectativa de los seguidores.

La Renga la rompió en Huracán después de 10 años y va por más en los próximos días.

(Por Pablo Doglioli)