Buenos Aires SOS

18 de octubre de 2016.- A horas de volver a las calles al grito de NiUnaMenos, las trabajadoras de la Dirección General de la Mujer del Gobierno de la Ciudad, presentaron en la Legislatura porteña un presupuesto alternativo al presentado por el  Ejecutivo. También denunciaron el vaciamiento de los programas contra la violencia de género que lleva adelante el gobierno de Rodríguez Larreta.

A sala llena en el Salón Alfonsín de la Legislatura porteña, las trabajadoras de la Dirección General de la Mujer presentaron un presupuesto elaborado por ellas con lo que consideran lo mínimo e indispensable para garantizar la continuidad de los servicios y programas que funcionan en la actualidad en dicha institución. Se trata de un presupuesto alternativo al presentado por el Ejecutivo porteño, el cual reduce los fondos para los programas de asistencia y prevención de la violencia de género.

Con la presencia de diputados, diputadas, asesores y trabajadoras de las distintas áreas del organismo, se presentaron cifras contundentes: indican que de 1.600.000 mujeres que viven en la ciudad, 1 de cada 3 sufre o sufrió violencia alguna vez en su vida; que el 55% de las mujeres de CABA sufrió violencia psicológica; el 22% violencia física; y que solo 1 de cada 10 buscó ayuda en una institución pública.

Muy pocas de esas mujeres acudieron a la Dirección General de la Mujer, el único organismo gubernamental dirigido a prevenir la violencia de género y asistir a las mujeres en situación de violencia en la ciudad -en la cual durante 2015 se registraron 12 femicidios y casi 800 delitos contra la integridad sexual-.

Uno de los reclamos de las trabajadoras es la falta de visibilidad y difusión de los servicios, que repercute con fuerza en los programas, como por ejemplo la Línea de atención 0800 66MUJER pasó de 21.200 a 9.200 llamadas en los últimos ocho años. A esto se suma la drástica reducción de personal que disminuyó a casi la mitad en los últimos años y que afecta directamente a las mujeres en situación de emergencia por violencia que no pueden ser atendidas. Los números hablan por sí mismo: de 10.400 llamadas recibidas, sólo pudieron ser atendidas 5700 por falta de operadoras. Hay programas, como el de «Noviazgo sin violencia», que cuentan con una sola trabajadora y solo tienen una única abogada para todos los casos de la zona sur de Capital.

La exposición centró el pedido principalmente en el aumento de la planta de recursos humanos, plantean que se necesitan 108 personas más entre profesionales y operadoras, para que el servicio que brindan sea integral. También piden más presupuesto para mantenimiento edilicio y bienes de uso, para cosas elementales como una camioneta para que las mujeres de los refugios puedan trasladarse, camas, lavarropas, etc.

Una denuncia importante fue que el único ítem del presupuesto presentado por el Ejecutivo que se incrementa en más del 100% (mientras que el resto disminuye) es el de los fondos que el estado destina a las Organizaciones de la Sociedad Civil. De hecho, ya confirmaron que los Centros Integrales de la Mujer (CIM) serán administrados por ONGs. En realidad, ésta es una responsabilidad indelegable del Estado, garantizada por la ley 5.466 que asegura la existencia de un CIM por Comuna.